Pon mi vida en opciones

Mi mundo no son ustedes.

Mi mundo son ustedes y no es lo mismo.

Mi mundo no es como el tuyo.

Mi mundo es como el tuyo y, no, de verdad no es lo mismo.

Mi mundo eres tú.

Mi mundo no eres tú y no, no es contradictorio, es otra persona.

De verdad.

Mi mundo son ustedes, todos ustedes, que sin darse cuenta hacen mi mundo, mi vida, mi tierra y mi voz. Mi mundo no son ustedes. Ustedes no, porque no quieren estar en mi mundo, nada de vida, nada de tierra y nada de voz. Mi mundo no es como el tuyo porque mis ojos no creen lo que ven, lo niegan y siempre que pueden voltean a verte, de frente y se detienen y se tambalean y se caen y ruedan. Mi mundo no es como el tuyo porque en mi mundo, existen cosas que trasienden el tiempo y el espacio, lamentablemente en el tuyo no, la emoción es muy fuerte ahí y yo no soy tan latente. Así pasa. -Gracias, igual-. Mi mundo eres tú, que me sonries, que me sientes y me quieres, tú que me entiendes, me oyes y me consuelas, tú que me atiendes y me soportas, no es tan difícil (digo yo). Mi mundo no eres tú porque no quieres. De verdad.

Mi mundo es aprender.

Mi mundo es querer.

Mi mundo.

Mi mundo es mío. Yo lo destruyo y controlo,

lo fijo, lo cierro, lo pinto y compongo.

Yo solo.

Pido aire y un poco de tiempo.

Mi mundo es el mismo. Es él mismo.

Podrá ser así siempre, pero, ustedes y yo, tenemos el mismo cielo.